El empleo de distintos tipos de láser en tratamientos bucodentales es uno de los avances más punteros en el campo de la Odontología.
Es cierto que, en algunos casos, todavía se encuentra en fase experimental. Sin embargo, su efectividad y sus ventajas están constatadas en procedimientos de diversos campos odontológicos como, por ejemplo, la Estética Dental o la Cirugía.
Pero, ¿qué beneficios tiene el láser en odontología y cuáles son sus aplicaciones?
¿Qué tipos de láser se emplean en Odontología?
La aplicación del láser en Odontología depende, fundamentalmente, del tipo de tejido bucodental sobre el que se quiere actuar y del fin del tratamiento. Y es que sus efectos dependerán de la longitud de onda del láser -es decir, de su potencia-.
Por ello, en primer lugar, es necesario que el odontólogo conozca a la perfección las necesidades de cada tratamiento y las consecuencias que se van a desprender del uso del láser para, posteriormente, aplicar la longitud de onda adecuada.
A este respecto, podemos distinguir dos tipos de láser diferentes empleados en Odontología:
- Por un lado, el láser de diodo, aplicado en tejidos blandos como, por ejemplo, el frenillo o las encías.
- Por otro, el láser de erbio que, además, es susceptible de ser empleado en tratamientos que precisan la aplicación del láser en piezas dentales o hueso óseo.
¿Qué aplicaciones tiene el láser en Odontología?
El empleo del láser en el campo de la Odontología es uno de los grandes avances en este sector. Si bien hay algunos procedimientos en los que su eficacia está demostrada, en otros todavía se encuentra en fase experimental.
A continuación, desgranamos uno a uno los distintos tratamientos en los que el láser se emplea de manera habitual en la actualidad.
Obturaciones dentales
Una de las aplicaciones más comunes del láser es en tratamientos conservadores, de cara a la preparación de las cavidades para posteriormente, tratar lesiones cariosas.
Siempre que las caries no sean demasiado extensas, el empleo del láser puede ser muy beneficioso a la hora de eliminar el tejido dañado.
Pero, además, en el caso de caries profundas el láser es empleado en sustitución del hipoclorito sódico. Éste es un componente usado para eliminar los agentes patógenos presentes en la pieza dental.
Recientemente, se ha demostrado la eficacia del empleo de láser para eliminar estos microorganismos de los conductos radiculares.
Por último, su uso también es habitual a la hora de cambiar antiguas obturaciones realizadas en amalgamas.
Gracias a su aplicación, se elimina el material antiguo y se prepara la cavidad para realizar una obturación en un material mucho más estético como es el composite.
Preparación de piezas dentales para otros tratamientos
El láser se emplea, en muchas ocasiones, para preparar las piezas dentales a la hora de abordar un tratamiento odontológico. Tal es el caso de su uso previo a la colocación de carillas estéticas o, por el contrario, al sellado de piezas dentales.
Blanqueamiento dental con lámpara de luz fría
El blanqueamiento dental con lámpara de luz fría -o láser- tiene resultados muy notables en apenas una sesión.
Y es que, gracias a su aplicación sobre el agente blanqueador, la tonalidad de las piezas dentales del paciente se apreciará notablemente más clara.
Pero, además, cumple una labor fundamental dentro del blanqueamiento dental combinado. Éste aúna la acción de los kits ambulatorios de férulas empleadas en casa por el paciente con una sesión de lámpara láser en clínica.
Gracias a la misma, se mejoran y se prolongan en el tiempo los resultados obtenidos con el empleo de las férulas.
Cirugías orales
El láser tiene una gran aplicación dentro del campo de la cirugía oral. Además de su uso complementario, los especialistas pueden decantarse por su empleo a la hora de llevar a cabo algunas intervenciones.
El láser es empleado en cirugías que requieren una mayor desinfección de la zona intervenida como, por ejemplo, algunas cirugías periodontales -eliminación de bolsas periodontales- o periapicales -curetaje dental, ostectomía, etcétera-.
Además, su uso también es frecuente en cirugías llevadas a cabo como parte de un procedimiento ortodóntico.
Un ejemplo de ello es la extracción de dientes incluidos, de manera que el láser se emplea para acondicionar debidamente el esmalte de los dientes sobre los que se colocarán posteriormente los brackets.
Por último, el especialista puede decantarse por el uso del láser en lugar del bisturí en cirugías como, por ejemplo, la frenectomía labial o lingual, o cuyo objetivo es atajar lesiones de tejidos blandos. Las más conocidas a este respecto son aquellas destinadas a extraer tumoraciones benignas, mucoceles o aftas.
Tratamientos estéticos: su uso en la gingivectomía
La gingivectomía es un tratamiento destinado a eliminar parte del tejido gingival, de manera que el paciente muestre una mayor proporción de corona que de encía.
En algunas ocasiones, el experto en estética dental prefiere optar por su realización con láser de diodo en lugar de con electrobisturí debido a las mejoras en el proceso postoperatorio.
¿En qué tratamientos no está demostrada la eficacia del láser?
El láser tiene numerosos beneficios para los tratamientos dentales que desgranaremos más adelante. Sin embargo, su uso no está recomendado en los siguientes supuestos:
- De cara a la preparación de los márgenes gingivales para una posterior colocación de prótesis dentales, pues no tienen la misma precisión del instrumental rotatorio.
- A la hora de extraer tumoraciones que deban ser analizadas vía biopsia, de manera que el calor no altere los resultados de los análisis.
Además, todavía se encuentra en fase experimental en tratamientos para mejorar sobrecargas en la articulación temporomandibular, facilitar la osteointegración de los implantes dentales o favorecer el movimiento de los dientes en tratamientos de ortodoncia.
¿Qué ventajas tiene su aplicación en la Odontología?
El uso de láser en tratamientos bucodentales tiene varias ventajas, tanto para el paciente como para el odontólogo. Y es que su empleo:
- Aumenta la precisión del tratamiento.
- Evita el uso de anestesia, por ejemplo, en caso de su uso para tratamientos obturadores. De esta manera, se eliminan las molestias posteriores derivadas de tener la boca dormida.
- Mejora el postoperatorio del paciente, acusando niveles más bajos de dolor y aminorando la posibilidad de padecer infecciones.
- Reduce el riesgo de presentar edemas o sangrado tras cirugías orales.
- Es un método mínimamente invasivo que, en algunas ocasiones, evita tener que dar puntos de sutura.
- El láser es más silencioso y discreto que otro tipo de instrumental odontológico. Por ello, reduce la sensación de ansiedad y miedo de los pacientes que padecen odontofobia.
Inconvenientes del empleo del láser dental
Existen dos inconvenientes principales a la hora de decantarse por el uso del láser dental frente a otros instrumentales en aquellos procedimientos en los que su uso está indicado:
- Por un lado, el alto precio de los equipos
- Por otro, la necesidad de formación y cualificación al respecto del especialista que está llevando a cabo el tratamiento.
Como ves, este avance ha supuesto un antes y un después tanto para los odontólogos como para los pacientes -especialmente, para los más miedosos-. En Avodent aprovechamos las ventajas del láser en distintos procedimientos.
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