Si tienes que hacerte una ortodoncia, ¿no sería estupendo mostrarle continuamente al mundo tu sonrisa en lugar de tus brackets? Pues gracias a la ortodoncia lingual ahora es posible.
Probablemente la ortodoncia lingual sea uno de los tratamientos de ortodoncia más desconocidos. Y lo es, básicamente, porque nadie puede saber que otra persona lleva puesta una.
Si creías que el Invisalign era perfecto porque casi nadie se daría cuenta de que llevas puesto un aparato, la ortodoncia lingual te llamará todavía más la atención.
Vamos a ver por qué y cuáles son las ventajas de este desconocido tratamiento.
Qué es una ortodoncia lingual
La ortodoncia lingual se basa en la colocación de los brackets sobre la cara interior de los dientes.
De este modo, se corrige el alineamiento incorrecto de los dientes mediante la presión de los alambres desde la zona lingual, sin que externamente se aprecien los mismos. En otras palabras, es casi una ortodoncia invisible.
Estamos ante un tratamiento que a nivel de costes se sitúa en una posición intermedia entre los brackets tradicionales y el Invisalign.
Nosotros solemos recomendar esta opción a aquellos pacientes que no quieren someterse a la ortodoncia invisible por cuestiones económicas, pero que desean que su ortodoncia pase desapercibida.
Ventajas de la ortodoncia lingual
- No molestan en el día a día: al estar situados los alambres por el interior, no molestan ni afectan a la dicción. Tras un pequeño período de adaptación, te adaptas a los mismos casi sin problemas.
- Reducen el riesgo de sufrir cortes o daños: los brackets se colocan sobre la cara interior de los dientes, lo que reduce bastante el riesgo de sufrir daños o cortes en el labio en caso de que se sufra un golpe.
- Precisión del tratamiento: la posibilidad de ajustarse y adaptarse a todo tipo de movimientos es prácticamente infinita. De este modo, se consiguen mejores resultados que con otros tratamientos de ortodoncia.
- Corrección mayor: si comparamos la ortodoncia lingual con el Invisalign, se aprecia que ciertas irregularidades (como los dientes girados o con diferentes alturas) se corrigen mejor con los brackets linguales que con la ortodoncia transparente.
- Manchas «ocultas»: si se producen decoloraciones dentales por culpa de una higiene deficiente durante el tratamiento, estas manchas siempre se encontrarán en la cara interior donde no son visibles.
Desventajas de la ortodoncia lingual
- Es difícil acostumbrarse a ellos: teniendo en cuenta que los alambres se encuentran colocados junto a la lengua, durante las primeras semanas a algunos pacientes les cuesta acostumbrarse.
- Es más complicado mantener la higiene dental: al estar colocados los brackets en la parte interior, es más difícil mantener la higiene dental. Además, en caso de que sufras problemas periodontales, tal vez la situación se agrave por culpa de la ortodoncia lingual. En estos casos, será el dentista quien decida sobre la conveniencia o no del tratamiento.
- Suele requerir mayor tiempo de tratamiento: el tratamiento es más largo, sobre todo si lo comparamos con Invisalign o brackets tradicionales.
- Tratamiento más complicado para el ortodoncista: al trabajar sobre la cara interna de los dientes el espacio es de más difícil acceso y más pequeño, lo cual conlleva dificultades añadidas para el profesional ortodoncista.
El dolor en la ortodoncia lingual
Ya hemos explicado en otros artículos que el dolor es uno de los motivos por los que muchos posibles pacientes sienten miedo a someterse a un tratamiento de ortodoncia.
Sin embargo, una vez más hemos de recalcar que la ortodoncia no duele. Y la ortodoncia lingual tampoco.
Al igual que sucede con el resto de tratamientos, cada mes hay que acudir a consulta para realizar ajustes en los brackets. Es posible que durante estos reajustes se noten pequeñas molestias pasajeras, pero lo normal es que durante todo el proceso no sufras mucho dolor.
A quién está destinada la ortodoncia lingual
Por nuestra consulta pasan muchos pacientes cuyo principal objetivo es someterse a un realineamiento de sus dientes sin sufrir las molestias estéticas de unos brackets convencionales.
En función de las patologías propias de cada paciente, el apiñamiento dental específico y del presupuesto económico que se hayan fijado, recomendamos el tratamiento con brackets tradicionales, Invisalign o la ortodoncia lingual.
En todos los casos, los resultados son siempre buenos, por lo que no creas que estás eligiendo algo «mejor» o «peor» por elegir cualquiera de los dos.
¿Todavía te quedan dudas?
Si estás interesado en someterte a este tratamiento de ortodoncia lingual, pero todavía te quedan algunas dudas por resolver, te recomendamos que contactes con nosotros a través del formulario de contacto.
Si estás en Alcobendas y quieres acceder a una consulta gratuita para que podamos evaluar si la ortodoncia lingual es la mejor solución para ti, puedes llamar al 916 45 17 13 y te daremos cita de forma inmediata.